En la primera parte habrás asumido que tu hija ha sido secuestrada y te piden algunas exigencias. En esta parte llevas esas demandas en la maleta y llegas al lugar donde los secuestradores te pidieron que vinieras. Veamos con qué brillantez vas a rescatar a tu hija. Esto sólo se puede lograr si eres lo suficientemente valiente como para rescatar a tu hija. Como la vida de tu hija está en peligro, seguramente cumplirás las tareas.